Hoy me gustaría hablar de un videojuego a modo de review personal, al que guardo un especial cariño y que jugué por primera vez a la edad de 11 octubres. Se trata de un juego de MegaDrive que salió de las mismísimas entrañas de SEGA; en lo que en mi opinión fue una verdadera apuesta por su nueva joya de 16 BIT ante el resto del mundo: Streets Of Rage.
Claramente inspirado en la ciudad de Nueva York de principios de los ’90s (apreciable en esas preciosas vistas desde el round 7), el juego muestra unos variados decorados llenos de clichés callejeros del submundo del crimen neoyorkino tales como rascacielos, prostitutas, macarras con navajas, punkis chulos, asiáticos peleones con pelo largo y grasiento, licorerías nocturnas, carteles luminosos, botellines rotos usados para herir, aceras sucias, papeles por el suelo, cabinas telefónicas, graffitis, fábricas abiertas a altas horas de la noche, gordos agresivos, un barco que recorre el río (¿el Hudson?) muy bien estereotipado para el desarrollo de la historia en cuestión. Todo en una época (principios de los 90) donde todo el mundo sentía una especie de atracción a ese país llamado U.S.A el cual nos mostraba su realidad a través de cientos y cientos de películas con héroes callejeros salidos de Hollywood.
Para un chaval de 11 años, empaparse de un videojuego así, iba a traer consecuencias «rotundas» como explicaré más adelante. Este juego es mi videojuego de culto por antonomasia. Jamás un juego ha conseguido calar tan profundo en mi alma, y ninguno consigue que sienta lo mismo al volverlo a jugar en estos tiempos presentes. Echemos un vistazo a aspectos concretos a tener en cuenta en él:
«Alma neoyorkina, calles de neón»
«Furcias & River»
El diseño vino de la mano del gran maestro Noriyoshi Ohba, responsable de otras grandes joyas de SEGA que hicieron a esta compañía un honorable hueco entre las leyendas de los videojuegos, tales como Wonder Boy in Monster Land, Shinobi 1 y 3, Panzer Dragoon, Daytona USA y un largo etcétera. También se contó con la ayuda de Hiroaki Chino (conocido como Tinon), responsable del diseño del genial y posterior Sonic CD.
Para la programación contaron con Hiroshi Momota, responsable de nada menos que Altered Beast, Strider o Castle Of Illusion entre muchos otros. Con esto ya os podéis hacer una idea de la clase de gente que estaba reclutando SEGA para el futuro desarrollo de tan preciada joya… A eso se le llama llevar a primera línea a «los mejores» Y no se conformaron sólo con estos genios, tal y como iremos viendo.
A la izquierda, el bueno de Noriyoshi Ohba, a la derecha, boceto original de Sonic CD, por parte de Tinon (Hiroaki Chino)
He querido mostrar estas pinceladas para dar una dimensión de las mentes que esta legendaria empresa desarrolladora de consolas y videojuegos reunió para tal fin: Crear un brawler que fuese recordado y admirado por toda una generación de jugadores. El resultado: lo consiguieron.
El equipo completo encargado de su desarrollo fue SEGA AM7, y contaron con el inestimable talento del maestro compositor Yuzo Koshiro para el apartado sonoro y muy especialmente para guión musical y banda sonora. Este jovencísimo y creativo compositor ya había prestado su talento para SEGA componiendo la música en el fantástico port del arcade The Revenge Of Shinobi, otro que tampoco se queda manco…y otro de esos juegos que hacen irrepetible a una consola doméstica como Sega Megadrive.
En la foto el crack de Yuzo Koshiro, junto a una de las múltiples ediciones de la OST de Streets of Rage, edición que en concreto no es nada fácil de encontrar a día de hoy
Para crear esas melodías usó un ordenador PC 8801 y creó su propio código fuente para combinar los lenguajes musicales, usando de forma original el MML (Music Macro Language) (Fuente US Wikipedia). Fue asistido en el apartado sonoro por otro coloso de la industria, Takayuki Nakamura (responsable del sonido en todos los Virtua Fighter entre otros).
Dicha banda sonora es objeto de veneración y culto en todos los rincones del globo por su calidad y por su magnífico acompañamiento a cada situación reflejada en el juego. Destacaría la impresionante intro y el absolutamente épico ending, entre otras muchas joyas. Ha sido encuadrada dentro del estilo chiptune (chip de sonido SoundBoard 2) y destaca por su influencia funk, hip-hop y dance. Especialmente en Japón tuvo tal repercusión que fue vendida en un disco recopilatorio tiempo después del éxito del juego.
Veamos unos vídeos para ver toda esa magia fluyendo:
El juego nos muestra la historia de EL BIEN luchando contra EL MAL de la mano de tres ex-policias, Axel Stone, Adam Hunter y Blaze Fielding que han dejado su corrupto cuerpo de policía metropolitana para poder luchar contra un sindicato del crimen muy poderoso, el cual domina y corrompe cada estamento de su sociedad, incluidos los agentes del orden. Ellos SE NIEGAN a rendirse a la maldad, a la corrupción y al crimen, y precisamente ahí, comienza la historia.
Nuestros vocacionales defensores del bien
Esta ciudad fue una vez un feliz y pacifico lugar…hasta que un día, una poderosa y secreta organización criminal la absorbió. Este vicioso sindicato pronto tuvo el control del gobierno e incluso de la fuerza de policía. La ciudad se ha convertido en un centro de violencia donde nadie esta a salvo. Entre esta confusión, un grupo de jóvenes agentes de policía han jurado limpiar la ciudad. Entre ellos están Adam Hunter, Axel Stone y Blaze Fielding. Están dispuestos a arriesgar cualquier cosa…incluso sus vidas… en las Calles de Rabia
Sin armas de fuego y tan solo con sus habilidades de lucha cuerpo a cuerpo, recorren las calles de esa antigua ciudad modélica y armoniosa donde la paz y el orden imperaban, ¡todo un mensaje de dignidad y honor para la juventud! Puntazo de los chicos de SEGA.
Como dice el enunciado, en tan sólo 4 MEGAS de memoria fueron capaces de meter este colosal Beat Em Up de scroll lateral que durante 8 largos niveles nos muestra cada rincón de esa ciudad llena de rabia. El trabajo en equipo queda elevado a los altares en forma de ataque especial, acudiendo en nuestra ayuda un coche de policía con ex-compañeros afines a nuestra noble causa cuando la situación nos sobrepasa, otro gran mensaje subliminal. No olvidemos que hablamos de policías y trabajar codo con codo tiene siempre su beneficio.
Compañerismo para el bien
El juego fue publicado en Agosto de 1991 para Megadrive al precio standard de salida para Europa, 35 libras esterlinas (unas 7.000 calas de la época), contando con dos magníficas secuelas (Streets of Rage 2 es considerado uno de los tres mejores Beat Em Up de la Historia, con H mayúscula).
Personalmente esta primera parte es la que mejores recuerdos me trae y es mi juego favorito de la consola. Esto no es objetivo, pero aquí se mezclan muchas cosas intangibles. Posee una gran influencia del magnífico Final Fight de Capcom aunque estableciendo su propio estilo y una jugabilidad soberbia. Es rejugable hasta límites insospechados porque todo en este Beat Em Up esta perfectamente equilibrado.
El juego además, cuenta con la opción para dos jugadores, todo un acierto. Y es en este modo con el que tenemos acceso al Bad Ending, donde uno de los dos jugadores se unirá por decisión propia en la octava ronda al jefe del crimen metropolitano Mr. X… Un tío MU MALO y MU GRANDE.
Al finalizar el juego en modo dos jugadores, uno de ellos tendrá la opción de aliarse con el enemigo, pero recuerda chaval, ¡ese no es el camino!
En tal caso, el gran mafioso pide a su nuevo títere que venza en combate a su compañero, y en caso afirmativo, siempre acaba apareciendo la leyenda «BAD ENDING» como advertencia para esas jóvenes e inquietas mentes. Se trata de uno de los juegos más vendidos de la consola, pues fue incluido en el genial MegaGames 2 del pack Mega Acción que tantas Megadrive vendió en España, a saber cuantas de aquellas 39 millones mundiales.
Fue perfectamente publicitado a nivel mundial. Especialmente en el mercado estadounidense, donde «SEGA Genesis» (como se conoció allí a Megadrive) fue un éxito de ventas. A la izquierda, publicidad en territorio americano, a la derecha, publicidad aparecida en nuestro país.
También apareció posteriormente en el recopilatorio de clásicos de Mega-CD con un sonido FX digitalizado de mayor calidad; y versionado a consolas como Master System (un solo posible jugador) y Game Gear (eliminación de uno de los tres personajes seleccionables), ambas carencias muy importantes para este juegazo.
Las versiones de Master System o GameGear venían con recortes respecto sus versiones originales. Por otro lado, algunos de los recopilatorios que incluyen el juego, para sistemas clásicos y modernos
En tiempos modernos llego a XBOX 360 y PS3 en el recopilatorio de clásicos de Megadrive así como en consola virtual y esos rollos descargables. Se trata, resumiendo, de un juego muy jugado y muy difundido, un auténtico emblema de SEGA.
Otro aspecto absolutamente memorable de este juego son sus ARTES. Apreciando un poco más el lado puramente coleccionista, destaca su increíble portada, llena de épica y tragedia, caos y anarquía, desesperación y guerra urbana y un sinfín de calificativos más; ese francotirador en la ventana y esas deportivas marca «SEGA» de Axel que me dejaban flipando y queriendo unas para mí… mientras el entorno y los edificios «arden» de rabia. Ese macarra lamentándose arrodillado ante el coche policial y esa avenida en resumidas cuentas llena de crimen y desorden y rascacielos de fondo. ÉPICO.
He aquí el ARTE con mayúsculas, la portada europea:
La portada está inspirada en una película de 1974 llamada SISTER STREET FIGHTER. Nada como comparar portadas para ver de dónde beben las artes, ver el salto-patada de Blaze es algo verdaderamente revelador si observamos a Sue Shiomi en dicha portada setentera:
El parecido entre ambos artes es más que evidente
Artes Japoneses
En Japón se tituló Bare Knuckle: Ikari No Tekken – Puño de Hierro Furioso
Todo llega al final, y nada como unas vistas así para despedir una historia con final feliz…
Larga vida a esta joya inmortal de la MEJOR SEGA. ¡Abajo la corrupción! Quede aquí mi sentido y personal tributo a este inolvidable cartucho de 4 Megas!
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11 noviembre, 2016 a las 10:12 am
Recordar juegos como Streets of Rage (y comparto contigo que ésta primera entrega es sin duda la más carismática de la saga) es casi como volver a la infancia, a los bocatas de nocilla, a las tardes despreocupadas en las que el único objetivo en la vida era derrotar a Mr. X y toda su banda…. Esos tiempos nunca volverán, pero al menos nos quedan joyas como ésta para que no caigan en el olvido!
11 noviembre, 2016 a las 12:57 pm
Mitico e imprescindible. El 2 lo supera en casi todo, pero no cuenta con el aura tan especial y mágica que envuelve a la primera entrega. Todo un portento de videojuego.
Enhorabuena por el articulo. Me ha gustado mucho.
11 noviembre, 2016 a las 5:08 pm
Fuimos muchos los que estrenamos nuestra nueva y flamante Megadrive con este Streets of Rage, que como comenta el compañero Ultra líneas más arriba, venía incluido en el famoso Megagames 2. Eso marca, y aunque está claro que la segunda entrega lo supera casi en todo, el corazón manda!
17 noviembre, 2016 a las 5:10 pm
Magnífico y completísimo artículo dedicado a este histórico clásico, enhorabuena Ultra 4th Gen por este estupendo tributo a esa joya de beat ‘em up de principio de los ’90.
16 junio, 2017 a las 9:47 am
Adoro este juego, también es mi favorito de «Mega», fue al primer juego al que jugué en esta consola. Tal vez el segundo sea mejor, pero éste tenía algo especial. Aún sigo jugándolo, cuando voy a casa d mis padres desenpolvo la consola y lo enchufo.
Enhorabuena por el blog, aun siguen existiendo grandes blog retro, casi todos emigran a Youtube o desaparecen.